Dicen que mientras el viento vagaba por el bosque nocturno, la Luna Chie brillaba sobre la laguna de Guatavita. Allí habitaba la Abuela Bague, quien conocía acerca del Muyscubin, un relato de los números del 1 al 10 de la cultura muysca. Para este pueblo milenario, que habitó el territorio cundiboyacense, los números tienen una historia que contarnos, una historia que nos unen al origen del agua y de las montañas, de las estrellas y del cielo.