El ambiente en casa de Felipe no es el mejor. Él trata de pasar el tiempo tranquilamente, hasta que un día es contactado por una entidad llamada Max, que le anuncia que a través de él van a hacer llegar un mensaje muy importante. Felipe no sabe si esos contactos son reales o producto de su imaginación, sin embargo, en un viaje a México visita el famoso jardín surrealista de Edward James y en ese extraño lugar un chamán le confirma que los seres humanos están siendo atacados por fuerzas malignas.